VALOR PARA CAMBIAR: 8 de marzo

Uno de los mayores beneficios que me reditúan las reuniones de Al-Anon es que puedo encontrar nuevos caminos para aplicar mi programa. El coordinador de mesa de una de mis reuniones favoritas pasó una canasta llena de lemas de Al-Anon y sugirió que tomáramos uno y tratáramos de aplicarlo a este día. Fue interesante ver cuántos de nosotros parecíamos haber tomado el lema perfecto.
Al día siguiente me encontraba en una situación bastante tensa. Me esforzaba en solucionar un problema difícil, me sentía frustrado y disgustado y no veía una solución. Le pedí ayuda a mi Poder Superior y de repente recordé la canasta. Me imaginé acercándome una vez más a la canasta llena de lemas. De nuevo tomé exactamente lo que necesitaba; el papelito que me imaginé me recordaba: “Hazlo con calma”. Dejé de intentar forzar una solución y esperé hasta que pude encarar el problema con más tranquilidad. Me sentí mucho mejor, mi pensamiento se fue aclarando y en un momento dado apareció una solución.

Recordatorio para hoy

No es siempre fácil saber cuál instrumento de Al-Anon utilizar, especialmente en medio de una crisis. Agradezco al Poder Superior que conocer mis necesidades, y a las reuniones que me ayudan a encontrar nuevos caminos para utilizar estos instrumentos en mi vida.

“A medida que aprendemos a depender de nuestro Poder Superior aplicando el programa de Al-Anon en nuestra vida, el temor y la incertidumbre son reemplazados por la fe y la confianza.”

Un día a la vez en Al-Anon